¡Mira qué ricas albóndigas de pescado han salido con unos ingredientes que a priori tiraríamos porque se consideran un deshecho!
En cocina hay que dejar volar la imaginación, y sobretodo aplicarse el lema del aprovechamiento 100%.
Bien es cierto que podemos comprar expresamente unos lomos del pescado que más nos guste para hacer las albóndigas, pero considero casi un delito desperdiciar ese manjar para luego acabar triturándolo, cuando con los recortes quedan igual de buenas.
Es muy fácil y cómodo tirar, pero tenemos que mirar el bolsillo y hacer funcionar la máquina del raciocinio: antes de tirar cualquier ingrediente pensar qué uso le podemos dar… Y no siempre tiene que ser aplicado en cocina, como por ejemplo fertilizantes, jabones, ambientadores…
En este caso yo he realizado estas albóndigas con recortes de los pescados que suelo comprar enteros: hoy han sido salmón, rape y bacalao.
Siempre hago que les quiten la espina y me la guarden para hacer sopa o fumet, y cuando llego a casa y arreglo el pescado a mi gusto, voy repelando toda la carne que se queda en las espinas, cabeza, cocochas…
En un túper voy guardando todos estos trozos de pescado y cuando tengo bastante cantidad, los saco para hacer albóndigas o hamburguesas.
Bueno no quiero extenderme más, así que vamos ya con la receta.
Ingredientes
*Para las albóndigas
- Pescado cortado en trocitos muy pequeños (la cantidad dependerá de la cantidad de albóndigas que queráis hacer, yo utilicé alrededor de 600 gramos)
- 1 diente de ajo cortado muy chiquitito (también lo podéis poner machacado)
- Cebollino picado al gusto
- Eneldo fresco al gusto (opcional)
- 1 huevo
- Sal y pimienta
- Harina de garbanzo si hiciera falta para espesar la masa, y para rebozar las albóndigas
*Para el sofrito
- Aceite de oliva virgen extra
- 3 dientes de ajo
- 1 cebolla
- 1/2 pimiento rojo
- 1 tomate rojo grande o dos medianos
- 1/2 vaso de vino blanco
- 1/2 litro aproximadamente de caldo de pescado, de verduras o agua en su defecto
Preparación
*Formación de las albóndigas
1.- En primer lugar podemos poner el caldo con las espinas para que se vaya haciendo mientras formamos las albóndigas
2.- En un bol pondremos todo el pescado limpio de espinas, cortado a cuchillo muy chiquitito (no utilizo el robot porque no quiero que quede tan triturado)
el ajo cortadito, el cebollino, el eneldo, 1 huevo, sal y pimienta al gusto y con las manos limpias lo mezclaremos todo hasta que queden todos los ingredientes bien intregrados.
3.- Comprobamos la textura de la masa: tiene que quedar compacta para que se puedan formar bien las bolas y no se nos abran, pero a la vez jugosas, por lo que corregiremos si hiciera falta con un poco más de huevo para ligarla o harina de garbanzo para espesar.
4.- Una vez tengamos la masa a nuestro gusto, la dejaremos reposar media horita en la nevera para que coja cuerpo.
5.- Transcurrido ese tiempo empezamos a formar bolas y las vamos rebozando con harina de garbanzo, quitando siempre el exceso que puedan coger.
*Guiso de las albóndigas
6.- Cuando las tengamos todas formadas, es hora de hacer el guiso. Para ello pondremos en una cazuela ancha y bajita, un chorrito de aceite de oliva y vamos dorando las albóndigas.
7.- Cuando las tengamos ligeramente doradas todas, las reservaremos en un plato y en ésta misma cazuela haremos el sofrito.
8.- Pondremos a pochar por este orden, el ajo, la cebolla, el pimiento y el tomate… todo ello cortado en cuadraditos pequeños.
9.- Cuando lo tengamos todo pochado, añadimos el vino blanco y dejamos que reduzca y evapore el alcohol… como unos 5-6 minutos.
10.- A continuación colocamos encima del sofrito las albóndigas que habíamos reservado, cubrimos con el caldo de pescado y llevamos a ebullición.
11.- El tiempo dependerá de lo espesa que os guste la salsa… la verdad es que la harina de garbanzo que hemos utilizado para rebozar las albóndigas, va a ayudar mucho a que espese antes.
12.- Pero os recomiendo que a los 10 minutos de fuerte ebullición, se baje el fuego y se vaya cocinando poco a poco, moviendo la cazuela de vez en cuando con movimientos circulares, para comprobar que las albóndigas no se están agarrando en el fondo… Evitar remover con espátula para que no se rompan las albóndigas.
13.- Rectificar de sal, pimienta y la especia que os guste y listas para degustar.
¡Que aproveche!